Madrina | Concha PiquerReturn to the list

Rondabas por mi dehesa
Y un día me hablaste, llegando a mi altura:
ofrecido por www.flamencoexport.com
Su buen corazón, condesa,
Hará que en el toro, yo llegue a figura.

Y ordené a mis mayorales,
Conmovida por tu voz:
Apartarle dos erales,
Que a éste lo apadrino yo.

Subiste a los carteles en un momento.
Los brillos de tus caireles son mi tormento.

Madrina, por fuera jardín de rosa,
Por dentro zarza de espina.
ofrecido por www.flamencoexport.com
Madrina, mi pena es de dolorosa
Y nadie me la adivina.
No sabes de mi amargura,
Pues tu locura sólo es el toro
Y a solas me bebo el llanto,
De tanto y tanto como te adoro.
ofrecido por www.flamencoexport.com

Madrina, madrina, sin un lucero
Madrina, sin un te quiero.
La gente no se imagina,
Que el hombre de mi corazón,
Me llama sólo madrina.

Por culpa de una sonrisa,
Que echaste a unos ojos que había en barrera
ofrecido por www.flamencoexport.com
Un toro de mi divisa,
Manchó de amapolas tu estampa torera.

¡Si se salva, Padre Mío,
En silencio seguiré;
En tus manos los confío,
Que eres el del Gran Poder!

De nuevo por las arenas vistes de luces;
Y yo mi caudal de pena lloro entre cruces.

Madrina, por fuera jardín de rosa,
Por dentro zarza de espina.
Madrina, mi pena es de dolorosa
Mas nadie me la adivina.
No sabes de mi amargura,
ofrecido por www.flamencoexport.com
Pues tu locura solo es el toro
Y a solas me bebo el llanto,
De tanto y tanto como te adoro.

Madrina, madrina, sin un lucero
Madrina, sin un te quiero
La gente no se imagina,
ofrecido por www.flamencoexport.com
Que el hombre de mi corazón
Me llama sólo madrina
We use own and third party cookies to improve the navigation experience. By continuing with the navigation, we consider that you accept our cookies policy.